Un poco atrasado pero demonios estudio medicina y cuando hay tiempo de descanso no precisamente pienso en escribir esto pero después de unos buenos días de merecido descanso allá voy.
Modulo VI
Quizá para muchos sea el trimestre más interesante, el más impresionante o simplemente otro más. A mi gusto no sé si este o cuarto hayan sido de los peores que pasado, pero sí sé que fue espantoso. La gineco obstetricia es mucho que hacer y más en la sala de partos o la “toco” como ya la conocerán el cual es independientemente del mes del año hace un infernal calor olores muuuy desagradables ya verán. En principio de todo, los hospitales, que había como plazas durante mi curso eran: H. Tlahuac materno-infantil, Troncoso, Inguaran y que a veces pasaban por el INPER y por último el H. general de Iztapalapa lugar donde nacen mis más tenebrosas pesadillas y el más profundo repudio por los ginecólogos. La mejor plaza para entonces según las comparaciones entre compañeros es sin lugar a dudas Inguaran con la Dra. o Dr. Gil que se jacta de mucha bioquímica; en fin, ese lugar me lo describieron con Dres. de singulares características, las cuales me gustaría contárselas pero mejor de primera mano y como a mí no me toco ahí pues lo siento. Sin embargo la segunda mejor plaza es el mismísimo hospital de Iztapalapa, en Troncoso no atiendes ningún parto poca escuela lo cual se resume en desperdicio de tiempo, en el de Tlahuac un parto para cada rotación o sea un solo fletado.
Me baso en los números de partos atendidos por los compañeros en cada hospital y que cabe destacar que eso es de lo más fundamental en el hospital además del correcto seguimiento de este proceso.
Los ginecólogos por desgracia la mayoría (99%) son como todos los médicos especialistas, unos alzaditos, sin embargo estos puta se llevan los premios en arrogancia y soberbia; ya es muy conocida la maledicencia entre los docs, sin embargo estos no se quieren nada entre sí, son la misma antítesis de la benedicencia por definición. Encontraran dificultades al trato de estos seres ya que de entrada estos son los peores al discriminar la UAM en segunda, nada de lo que aprendas y leas está bien ya que estos seres, todos y cada uno de ellos tiene sus propios conceptos y esos son y no hay otros, así que si te dicen 2+3 es 5 y otro dice que no, que está mal que es 3+2, veras que al fin y al cabo son la misma chingadera, a, y eso sí, se actualizan mucho porque te preguntan algo y tu bien contestas y “pam” sorpresa el jodido termino ahora es otro y adivina que, lo tienes que investigar jajajajajajaja, sin embargo te digo, no te devanes los sesos en esas cosas ya que ni a nivel mundial se ponen de acuerdo no hay consensos de nada así que ya verás que todo es diferente, pero para la práctica todo es lo mismo, se niegan a menos preciar su trabajo, le quieren dar la misma importancia que a las otras especialidades, bueno si tu deseas ser de estos solo te pido que no vayas a ser así.
En Iztapalapa hay mucha práctica, bueno también depende ya que esta se lleva a cabo durante la noche y conozco a muchos compañeros que solo iban a dormir ¬¬/ bueno y aquí para atender partos hay que estar atentos en todo, desde el llenado de expedientes y la hojita de toco en la cual tienes que registrar la frecuencia cardiaca fetal, dilatación y borramiento del cérvix. Recuerdo mi primer tacto, no fue desagradable fue con mi vecina hace unos…. Jajaja. La paciente gritona (como casi todas) se movía mucho y estando a su derecha me enguante con la habilidad de cirujano mirando de reojo de vez en cuando a la residente que me observaba y me decía lo que tenía que tocar pero madre mía estaba muy nervioso, con gel en falanges informe a la paciente lo que pretendía hacer, así que con sumo cuidado separe los labios vaginales para descubrir el introito e introducir los dedos de gel, santa macarena no sentía ni puta de lo que me describía la residente, ¿cérvix? ¿Cuál?, solo sentía en el techo algo redondo como si su vejiga la hubieran llenado con cemento y para no alargar la incomodidad de la paciente retire mi mano y afirmando a la residente que si había tocado el famoso cérvix, así que fracasado me quite los guantes y como todo tiene un precio, había que pagar. La residente muy segura de su mando, me indico que ahora tenía que hacer la historia clínica de la paciente y llenar la hoja de toco, y así lo hice, cada hora tenía que checar la frecuencia fetal y la dilatación.
Llegado de nuevo el momento tuve que mirar de nuevo a mi paciente a la cara para informarle sobre la misma maniobra y que para mí era el siguiente intento (obvio eso no lo sabía ella). Enguantado de nuevo me dispuse a realizar el tacto con la mayor calma posible pero sin alargar la incomodidad de la paciente, y eme ahí teniendo el éxito que ya me había vanagloriado antes, solo había que introducir más los dedos, rodear la “bola” que era la cabeza del niño; y ahí estaba el mentado cérvix y digo estaba por que ya se había borrado y claramente sentí lo que después me dijeron que era el “signo del pelo”, la cabecita del chamaco, así que a informar a la residente de que ya había tenido los pelos de la burra en la mano y que ya venía, la residente no lo podía creer pues una hora antes no había tanta dilatación según lo que ella me informo y yo mentirosamente confirme, pero muy responsable fue a verificarlo, sus palabras “pasa paciente”.
Contento por mi logro y con más confianza empecé a realizar más tactos, unos más difíciles que otros puesto que el cérvix se encontraba muy posterior, y como todo en la naturaleza había unas muy grandes y otras muy pequeñas pero igual de incómodo para todas el que las revisasen. No me gusta la ginecología pero eso no implica que no haga el mejor trabajo, así que si vas a realizar tactos comprate un gel lubricante ya que escasean, ya que ti no te gustaría que a una mujer cercana a tu familia o a ti misma te metieran los labios vaginales por la misma sequedad, y pues por lo visto las mismas mujeres son las que menos toman en cuenta eso, que desgracia. Y cuando realices tacto y eres hombre no los realices solo ni con otro cabron pídele a una de tus compañeras que te ayude o que simplemente este ahí, para evitar malos entendidos.
Cuando cheques la frecuencia fetal trata de usar el estetoscopio de pinard y en segunda mano el doppler fetal si los residentes cuentan con él, esto, en lo que agudizas tu oído con el pinard. Cuando trates de escuchar con el pinard hazlo con el oído que te deje mirando hacia la cabeza de la paciente ya que como otros que no hayan leído esto jajajajaja se llevaran la desagradable experiencia de un encuentro cercano de primer tipo con el olor que te perseguirá aun estando en tu casa. Sobre la técnica pues ya lo irán aprendiendo, de cómo no tomarla durante contracciones y buscar el foco de acuerdo con las maniobras de Leopold.
No les describo los partos que atendí ya que ustedes los podrán observar de primera mano, solo les digo que a las pacientes no les den las manos desde que están en la toco hasta que están en el parto ya que pueden salir lesionados jjajajajajajajaja ¡no es broma! Aprendan y practiquen mucho las suturas ya que si llegan a atender un parto o solo realizar una episiorrafia les servirá mucho, porque no es fácil. Respeten y traten muy amablemente a las pacientes ya que algunos ginecologos son muy groseros con ellas ustedes sean igual muy pacientes ya que el dolor por el que pasan no las deja comportarse como nomrlamente lo harian, imaginate que te este saliendo una bola de boliche por el culo y yo te ando preguntando como te sientes, ¿que me contestarias?.
Ahora pasemos a la parte de los libros, todos y cada uno de los que hay no me gustaron, en lo personal el Williams de obstetricia es una basura, rescatable el de ginecología pero el otro basura, un buen libro de fácil lectura pero no para profundizar es el de Mondragón, otro libro que si es bueno es el Manual de maniobras y procedimientos en obstetricia de Armando Félix Báez; otros libros que pueden ocupar son el de Ralph Benson y el Gonzales Merlo, todos estos los revise y ninguno me gusto quizá llegue a encontrar uno en la biblioteca de la escuela pero de hace muchos años el cual ya hay una nueva edición es Obstetricia de Schwarcz (no es Schwartz que es de cirugía) pero desafortunadamente se me acabo el trimestre y me quede sin libro de base y quizá compre este último para repasar y ya les comentare.
Los doctores de la escuela bueno pues no sé qué decir son ginecólogos jajajajajajaja, cuando yo iba a entrar a 6 todos querían con los parientes el papa o el hijo creo uno es rico y el otro calvo, no sé, pero los que estuvieron con ellos pues una vez más decepcionados por todo lo que les decían, ya no se vayan con la finta que si es el mejor que si es el bueno, guíense por la plaza de hospital en donde de verdad se aprende lo de la escuela ya es cosa de uno, uno podrá leer y punto, bueno a medias ya que son ginecólogos. Yo estuve con la Dra. Isayana, que si es buena, si porque no, que es necia, como todos los demás claro que sí, pero si vas a estar con ella te sugiero que consigas las guias del INPER ya que ella se basa mucho en estas y según me informan los que estuvieron por allá, que los del mismo INPER dicen que están mal y no las siguen pero ella si jajajajajajja. Aclaro como mencione antes si te toco con la Dra. Isayana desde el primer día vete bien descansado y con una libreta ya que ella empieza su clase desde el primer día.
En este trimestre hay un taller de cirugía el cual para no hacer largo este post lo describiré en otra ocasión
Y de nuevo si encuentran incoherencias no critiquen que así salió de jalón.
En este trimestre hay un taller de cirugía el cual para no hacer largo este post lo describiré en otra ocasión
Y de nuevo si encuentran incoherencias no critiquen que así salió de jalón.